Se instalaron cámaras para controlar los basurales
Los vertederos a cielo abierto siguen siendo una problemática urgente en el municipio. Medidas que se toman según el cuarto informe ambiental.
La Municipalidad de San Miguel de Tucumán cerró formalmente el primer año de emergencia ambiental frente al Concejo Deliberante. El último informe presentado expone el avance de los programas planteados inicialmente y hasta una mayor organización respecto de los primeros reportes. Sin embargo, como al inicio de 2024, los basurales a cielo abierto siguen siendo un eje problemático fundamental en la Capital: esta vez, el municipio reaccionó con la instalación de cámaras de seguridad en vertederos comunes, pero insiste en que la solución es “cultural”.
La página número dos del reporte noviembre-enero abre con un mapa de la Capital que contiene información sobre bateas, basurales y volcaderos activos e inactivos. Con iconos de basureros colmados y de bolsas de residuos amontonadas, el detalle de la división de las calles en la ciudad es difícil de ver. La única zona que no está cubierta por “emojis” es la céntrica. El municipio plantea que los basurales son supervisados de forma reiterada pero que se vuelven a formar en consecuencia de la mala conducta humana. Es allí donde introducen los resultados del programa Controlá, a través del cual se realizaron 118 visitas a tres basurales que se regeneran de forma cotidiana: el de Congreso y Pasaje Misiones, el de San Miguel al 1800 y el de La Rioja y Matheu.
En tanto, el informe indica que el Centro de Operaciones y Monitoreo Municipal (COMM) reubicó 11 cámaras y sumó nuevas, para facilitar la detección de vertederos de residuos. También se destaca la labor de la Brigada Ambiental Municipal (BAM), que realizó un total de 4.151 gestiones en el cuarto trimestre de 2024, que incluyen pedidos de limpieza de cestos, de levante de bolsas, de recolección institucional, entre otros.
A la hora de referirse a los avances del programa Transformá, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable que dirige Julieta Migliavacca parte del reconocimiento de que “el proceso de transformación no será lineal” y que se debe trabajar a largo plazo. “Tirar la basura donde no se debe es un mal hábito arraigado en la sociedad. De todas formas, hemos logrado sostener dos transformaciones en basurales de gran dimensión e históricos de la ciudad: los del barrio La Costanera y Juan XXIII”, fundamenta el texto.
En este escenario, la Municipalidad incorporó el relevamiento vecinal como una herramienta para recopilar datos, habiendo relevado más de 5.000 domicilios. Las autoridades informan al Concejo sobre esta y otras medidas siguiendo con lo establecido en la ordenanza N° 5.333 de emergencia ambiental, que se extendió por cinco años bajo la norma N° 5.412. Por ese mismo plazo también se extendió el contrato con la empresa Transportes 9 de Julio, encargada de la recolección de la basura en la ciudad.
Además de las cámaras en los basurales, en este cuarto período el municipio incorporó la colocación de calentadores, cargadores solares e infladores de bici en plazas y parques. La iniciativa busca que “los ciudadanos disfruten de los espacios verdes de la ciudad con nuevos servicios y en sintonía con el cuidado del medio ambiente”. Son totems alimentados con energía solar 100% renovable, que permiten cargar la batería del celular u otros dispositivos electrónicos, llenar los termos con agua caliente o inflar ruedas de bicicletas.
Reciclaje y residuos
Con respecto al programa Separá y a la recolección y gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), el municipio comparte un cuadro que indica que se recolectó un total de 65.604 kilos de material reciclable. Un dato que no se observó en el informe actual y que sí estuvo en los anteriores fue la cantidad de desechos que llegaron a San Felipe desde San Miguel de Tucumán. En el trimestre febrero-abril de 2024, se anunciaba que se había reducido un 43% el total de RSU que enviaba el municipio capitalino a la planta de tratamiento.
En cambio, sí se notifica que entre noviembre de 2024 y enero de 2025 ingresaron a la planta 502 camiones de residuos verdes, que cargaron alrededor de 2.600 metros cúbicos de los mismos, en el marco del programa Compostá. Se trata de acciones que se traducen en sistemas de valorización de los residuos verdes, que incluyen compostaje a cielo abierto, producción de chips de madera, leña social y otros, utilización de troncos como biomasa y compost entregado a vecinos y a dependencias del municipio.
En el escrito que presentó la gestión de Rossana Chahla al Concejo Deliberante también se hace hincapié en la participación ciudadana. Por ejemplo, con el involucramiento de estudiantes en los programas medioambientales. El total de personas que participaron en alguna acción del programa Educá es de 3.984, durante los cierres del ciclo lectivo 2024 y las colonias de verano impulsadas.
Sin casos de dengue
Por otro lado, el informe apunta a las acciones que se llevaron a cabo durante la fase inter epidémica del dengue: frente a un total de 18.857 huevos de mosquito, se realizaron 29 operativos de descacharreo, se asistieron a 8.258 viviendas, se realizaron 73 fumigaciones y se colocaron 31 monitores con sensores de oviposición. “La comparativa entre las (cuatro) semanas epidemiológicas del año 2024 (582 casos) y el actual son alentadoras. Dan cuenta de la efectividad de las tareas de prevención y seguimiento realizadas. Al momento de escribir este informe, no se habían registrado aún casos de dengue”, asegura el escrito.
Por último, el informe resalta la presentación del primer Inventario de Gases de Efecto Invernadero (IGEI) y la creación de estaciones climáticas (que ofrecen agua, frutas y atención médica gratuita) y producción de biogás en Overo Pozo. Sobre el plan Pre Lluvias, el municipio asegura haber cumplido en un 100% las tareas previstas para 2024 y retirado 1.901 toneladas entre residuos y malezas en los canales y puntos de desagote.
Ejes de la cuestión ambiental
- San Miguel de Tucumán se encuentra bajo emergencia ambiental y sanitaria desde febrero de 2024 y lo seguirá hasta 2030.
- Uno de los problemas que llevó a la declaración de la emergencia fue la existencia de basurales a cielo abierto.
- El municipio admitió que erradicarlos por completo es una tarea difícil si no se cuenta con el apoyo y la educación ciudadana.





